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¿Qué sistema de apertura elegir para mi puerta rápida?
Hoy en día, una de las decisiones más importantes que hay que tomar en cualquier instalación es seleccionar la mejor opción de puerta. De entre todas ellas, una la elección que más se ha realizado y desarrollado en los últimos tiempos ha sido, la de las puertas rápidas.
Las puertas rápidas son la elección perfecta para mejorar la eficiencia y productividad de las naves industriales y almacenes, donde pueden colocarse tanto en accesos interiores como exteriores. Resultan fundamentales en áreas de trabajo con mucho tráfico de vehículos y zonas donde no se quiere perder temperatura entre diferentes estancias, por lo que no solo contribuyen a optimizar la entrada y salida de mercancías, sino que generan un importante ahorro energético.
Por ello, una vez han seleccionado su puerta rápida adecuada, una de las preguntas que más surge entre nuestros clientes es, qué opción de apertura les conviene.
¿Qué deben proporcionar estos sistemas de apertura?
- Accesos fluido y rápido de personas y mercancías.
- Seguridad, para que las puertas no sufran bloqueos o se estropeen con facilidad.
- Durabilidad y fiabilidad, no solo la puerta debe ser fiable y robusta, sino también los sistemas de apertura.
- Y que sean higiénicos, minimizando los posibles contagios por la transmisión de gérmenes o virus.
Actualmente, existe una gran variedad de opciones de apertura. Desde las tradicionales, que siempre se han encontrado en el mercado, hasta las nuevas formas más digitalizadas. Para elegir el sistema de apertura más adecuado en cada caso, el cliente debe de pensar
- ¿Qué uso que va a tener esta puerta?
- ¿Van a pasar solo vehículos, solo personas o ambos?
- ¿Va a soportar un tráfico intenso de vehículos o personas durante todo el día o solo de vez en cuando?
- ¿Va a estar situada en una zona qué necesita unas condiciones de higiene muy estrictas y o sometida a limpieza con productos químicos?
- ¿Va a estar en contacto con alimentos?…
No siempre es una elección sencilla, a veces se busca una solución más económica, pero a medio plazo resulta perjudicial en la instalación y acaba resultándole más caro al cliente, así que, para intentar ayudaros, vamos a analizar los sistemas de seguridad y daros algunas claves para que podáis elegir el más adecuado en cada situación.
BOTONERA CON PARO DE EMERGENCIA
Una botonera con parada de emergencia es un interruptor de control manual a prueba de fallos, que detiene la puerta rápidamente, para proporcionar seguridad tanto a las personas como a la maquinaria, si existe riesgo de lesiones durante el flujo de trabajo.
La botonera con paro de emergencia debe ser visible para todos los usuarios que lo necesiten.
Esta botonera permite además bloquear la puerta, si se pretende tenerla abierta durante algún tiempo para introducir o sacar mercancía de un área determinada.
Todas nuestras puertas automáticas van equipadas con una botonera de apertura IP67 con seta de paro de emergencia (incluida en el precio) que permite abrir la puerta, desde el lado opuesto a donde está colocado el cuadro de maniobras.
TIRADORES DE TECHO
Otra de las opciones con las que el cliente se encuentra son los tiradores de techo, que permiten que la puerta se abre cuando se tira de la cuerda que se encuentra suspendida a algunos metros de la puerta.
Este tipo de apertura es de los más utilizado, puesto que su uso es muy sencillo y, además, es una de las opciones más económicas. En nuestro caso, solo utilizamos tiradores de PVC alimentario, para que así sean aptos para el sector agroalimentario.
Pero ¿conoces los tiradores de techo inalámbricos?, ¿Sabes cómo funcionan?
Estos tiradores, al no tener cuerda, funcionan mediante un sensor, que se instala en el techo y tiene un punto de activación en el suelo, por lo que cuando una persona quiere activarlo, lo único que tiene que hacer es al pasar por encima de ese punto, es el gesto de apertura con la mano, como si estuviese tirando de la cuerda de un tirador tradicional y la puerta se abre de manera automática. Esta solución garantiza la higiene, ya que no necesitas tocar ningún elemento, y la estética, ya que se evita tener cuerdas colgando que se puedan ver en la instalación.
CAMPO MAGNÉTICO
Una tercera opción que puedes encontrar son los campos o lazos magnéticos. Esta alternativa es la solución ideal si en la instalación va a ser usada casi exclusivamente para el paso de vehículos, como los transpaletas.
Este tipo de apertura se activa cuando este lazo magnético instalado detecta la presencia de masas metálicas como los vehículos, por lo que se trata también de una solución higiénica.
¿Cómo se instala? Por medio de un cable largo espiral que forma un circuito cerrado, que se entierra bajo el pavimento en un área predeterminada a proximidad de la puerta, creando el campo magnético. Así, cuando éste detecte la presencia de la maquina / vehículo, se producirá un cambio en este campo magnético, enviando una señal que activará la apertura de la puerta.
Una pregunta que te puede surgir es qué sensibilidad tiene a esta masa metálica el campo magnético. La respuesta es tan sencilla, como que tú controlas desde el cuadro de control la sensibilidad, ajustándola a las necesidades de tu cliente y de su instalación.
RADARES O SENSORES DE APERTURA
Otro tipo de apertura muy utilizado son los radares de apertura que son sensores que crean “microondas” a una frecuencia muy elevada, que detecta tanto el paso de personas como de vehículos dentro de su “área de activación”, y se abre una vez nota su presencia.
Hay que tener en cuenta, y es muy importante, saber qué se pretende con su instalación. Es decir, al no discriminar entre personas y vehículos, se activará de manera fácil, y ya que su zona de influencia es muy amplia, podría darse la situación que se encontrase la puerta abierta durante bastante tiempo. O estar en constante apertura y cierre, produciéndose un mayor gasto energético y desgaste de la puerta.
Pero, actualmente existen sensores de apertura que discriminan entre vehículos y personas. Éstos son más sofisticados, pero van a permitir que el radar solo se abra cuando accedan o personas o vehículos.
MANDO A DISTANCIA
Una de las aperturas más tradicionales en los últimos años, y que no solo se utilizan en el mundo industrial sino también en el residencial, es el mando a distancia.
Este tipo de apertura se utiliza tanto con las puertas automáticas de las instalaciones industriales, como en las puertas de los garajes, aunque su sistema de control es algo diferente.
En este caso, en el mando a distancia de una instalación industrial, se colocaría un receptor en el interior del cuadro de maniobra que permitirá abrir la puerta a cualquier operador que cuente con un mando a distancia con el canal del receptor.
¿Puede tener varios canales o receptores un mismo mando a distancia? Sí, éstos pueden tener varios canales, siendo el más común y utilizado el de 4 canales, pero también hay de 8,16 o 32.
¿Qué me permite esto? Que tenga varios canales significa que con uno solo mando se podrán abrir diferentes puertas, siendo un canal un receptor de una puerta. Esto quiere decir que un mando a distancia con un canal solo servirá para abrir una puerta, pero si tiene 4 canales, entonces que con ese mando se podrán abrir 4 puertas diferentes.
SIN CONTACTO – CONTACTLESS
Una de las más novedosas opciones y de las más importantes en los últimos meses, tras la situación epidemiológica que estamos viviendo con el coronavirus (Covid-19), es el pulsador sin contacto o contactless.
Esta opción de apertura trabaja igual que los sensores o radares, a través de crear microondas que activan la puerta cuando reconocen movimiento en su área de influencia. Además, puede presentarse de maneras diferentes:
- Pulsador contactless independiente.
- Integrado en la guía de la puerta.
- Integrado en el cuadro o en la botonera.
Las ventajas que presenta esta opción es que es completamente higiénica, ya que no hay necesidad de contacto con el sistema. Es eficiente y eficaz, ya que permite mayor rapidez de movimiento entre áreas, y además permite un mayor ahorro energético.
¿Para qué negocios o sectores está pensado?
Hasta hace poco era el más utilizado por el sector sanitario, farmacéutico o químico, donde se trabaja en entornos esterilizados, laboratorios etc. Pero cada vez está más presente en cualquier tipo de instalación, especialmente en aquellas donde exista contacto con alimentos, como el sector agroalimentario.
ACCESO RESTRINGIDO (TECLADO NUMÉRICO, TARJETA o LLAVE)
Este tipo de sistemas de apertura pretende limitar el acceso a ciertas zonas o áreas en el interior de una instalación, para que estas puertas solo puedan ser utilizadas por personal autorizado y así garantizar el acceso seguro al interior de una sala o zona de trabajo específica.
Os mostramos tres elecciones diferentes:
- Teclado Numérico: es un cuadro con números y símbolos, que se encuentra al lado de la puerta, y que necesita de un código numérico para poder acceder a la sala.
- Tarjeta de Acceso: es un cuadro con una apertura, que se encuentra al lado de la puerta, y que necesita de una tarjeta que se insertará, o se pasará por esa rendija para poder acceder al interior de la zona. Otro tipo, son cuadros en los que solo acercando o apoyando la tarjeta en él permitirán la apertura de la puerta.
- Llave: El cuadro o botonera de la puerta puede a su vez tener una cerradura y solo aquellos que tengan esa llave podrán entrar al interior del área de trabajo.
BALIZA LUMINOSA Y SONORA
Las balizas son un elemento de seguridad adicional que se activan con la apertura o cierre de la puerta, las que usamos habitualmente son a la vez luminosas y sonoras. En este caso, la baliza se activa emitiendo una luz intermitente y un sonido de aviso, mientras la puerta está en movimiento, para que tanto personas como vehículos, extremen la precaución si pretenden pasar por esa puerta o por uno de los pasillos donde la puerta esté instalada.
Este tipo de apertura se suele utilizar en ámbitos donde el tráfico de persona y vehículos es elevado y se quiere tener un entorno seguro, sin accidentes.
SEMAFORO REGULACION TRAFICO
El semáforo sirve como elemento de regulación del tránsito entre vehículos y personas, indicándonos cuando una puerta está abierta y se puede pasar, luz verde, o cuando está cerrada, ya que puede estar siendo ocupada esa zona por el otro lado del área, luz roja.
Se utiliza para que la mercancía pueda circular de manera óptima en el interior de la nave.